Esmalte acrílico al agua de acabado blanco satinado para la protección y decoración de todo tipo de radiadores y tuberías de calefacción.
CARACTERÍSTICAS
Excelente poder de cubrición.
Buena estabilidad del color, no amarillea.
Producto en base agua sin disolventes.
Rápido tiempo de secado y de formación de película.
Buena resistencia a la abrasión.
Resiste el lavado y fregado con detergentes comunes.
Buena resistencia al calor (máximo 110º C).
Fácil aplicación.
Bajo olor.
ESPECIFICACIONES TÉCNICAS
Naturaleza Acrílica
Color Blanco
Brillo Satinado
Resistencia térmica 110º C
Secado al tacto 20 ºC HR 60 % 1 hora según espesor y condiciones ambientales
Repintado 6 horas
Secado completo 7 días
Rendimiento teórico 12-14m2/l según soporte
*Las especificaciones técnicas pueden variar en función del color, soporte, humedad o temperatura.
APLICACIONES
Apto para proteger y renovar todo tipo de radiadores y tuberías de calefacción en interiores.
Adecuado para la protección y mantenimiento instalaciones domésticas.
Por su rápido secado y escasez de olor, se puede emplear en lugares cuya ocupación haya de ser inmediata como centros hospitalarios, públicos u hosteleros.
MODO DE EMPLEO
Homogeneizar el envase antes de su uso.
Producto listo al uso. No es necesario diluir, excepto cuando sea necesario por las condiciones de aplicación.
Para aplicar con pistola aerográfica, diluir con un 15 % de agua como máximo.
Superficies Nuevas
Realizar un lijado para matizar la superficie a tratar en caso de ser necesario.
Eliminar cualquier resto de suciedad, grasa u óxido por medios químicos o mecánicos.
Aplicar dos manos de esmalte con un espesor total de unas 60 µm, (30 µm por mano), dejando entre capas el tiempo necesario para el secado.
Evitar salpicaduras y la utilización de elementos abrasivos transcurridos al menos de 3 a 5 días de su aplicación.
Superficies ya pintadas
En el caso de repintados, si el sustrato a pintar se encuentra en buen estado, eliminar cualquier resto de grasa o suciedad adherida.
Matizar la superficie utilizando lija de grano fino, retirar los restos con un paño húmedo, dejar secar y aplicar una o dos manos de esmalte, según necesidades.
Si el soporte se encuentra muy deteriorado, eliminar cualquier resto de pintura mediante sistemas químicos, mecánicos o térmicos y proceder como si de una superficie nueva se tratase.